lunes, 11 de mayo de 2020

Ciencias Naturales 4°, Semana 3

 elemento decorativo

SEMANA DE APLICACIÓN: 
COLEGIO 

CALENDARIO
A
AÑO LECTIVO 
2020
GRADO 
PERIODO
PRIMERO
DOCENTE 


ESTANDAR
Identifico estructuras de los seres vivos que les permiten desarrollarse en un entorno y que puedo utilizar como criterios de clasificación.
COMPONENTE
Entorno vivo
Ciencia, Tecnología y Sociedad.
INDICADOR DE DESEMPEÑO
Conocimiento:
Diferencio desde mi contexto las características de camuflaje y desplazamiento de un ser vivo en el entorno, a partir de lo que percibo y observo.
Desempeño:
Comparo las características de camuflaje y desplazamiento de los seres vivos y los relaciono con las necesidades y los procesos naturales de adaptación en los diferentes ecosistemas. Y explico su relación con el medio.
METODOLOGÍA/ SECUENCIA DIDÁCTICA
  1. Unidad didáctica
Seres Vivos

  1. Propósito
Reconocer la importancia de las fuentes de energía para la supervivencia de los seres y la formación de las cadenas tróficas que se establecen en los ecosistemas.

  1. Desarrollo cognitivo instruccional 

¿De dónde obtienen la energía y el alimento los seres vivos?

Como se ha venido desarrollando en los temas anteriores, has podido darte cuenta de la importancia que tienen para el mantenimiento de nuestro planeta y de nosotros mismos las formas en que nos relacionamos entre cada uno de los elementos que componen los distintos ecosistemas. 

Ahora, ¿Qué pasa al final con todas estas relaciones? ¿Dónde empiezan y dónde terminan? ¿Dejarán los seres bióticos y abióticos de relacionarse entre sí? ¿Por qué los seres vivos nos alimentamos? ¿Qué elemento de los ecosistemas es el más importante para la supervivencia de las especies?  Si quieres conocer las respuestas a estas preguntas continúa leyendo porque te sorprenderás con lo que puedes descubrir. Empieza conociendo la historia de Juan Andrés y María Camila, dos estudiantes arquidiocesanos de grado cuarto.



Camila y Juan y  la búsqueda de la energía total
Autor: Víctor Alfonso Zapata

“Juan Andrés y María Camila, son estudiantes Arquidiocesanos de la ciudad de Cali, luego de haber estado toda una jornada académica en el colegio han llegado muy cansados a su casa y con un hambre tan tenaz que podrían comerse toda la comida del mundo. La mamá de Juan Andrés ha preparado carne guisada, con arroz, ensalada de repollo y jugo de mora, además una deliciosa sopa de alverjas. A Juan Andrés, no le gusta mucho la sopa, ni la carne guisada y su mamá le insiste en que debe comerse todo el almuerzo porque este le dará la energía que necesita para ir al entrenamiento de su deporte favorito.

Por su parte, el papá de María Camila, que es un experto cocinero le ha preparado a su hija, un arroz atollado, que tiene piangua, arroz, camarones y leche de coco, acompañado de tostadas de plátano o patacones y una limonada helada. A María Camila, le encanta el arroz atollado y se come con gusto el almuerzo porque sabe que lo necesita para obtener la energía y fuerza necesaria para ser una estudiante que aprende fácilmente lo que enseña su profesora Lizeth en la clase de ciencias naturales. 
                                                                      Imagen: https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-16454730

Juan Andrés y María Camila, saben que la energía que necesitan para todas sus actividades, provienen de los alimentos que consumen a diario. Lo que aún no logran entender es ¿cómo de los alimentos que consumen obtienen la energía que necesitan? Los dos, son muy inquietos y ávidos de conocimiento, por eso han decidido consultar en diversas fuentes, Juan Andrés, ha consultado en varios portales científicos en la internet. Mientras que, María Camila, ha decidido preguntarle a su profesora de ciencias y en algunos libros en la biblioteca y se han dado cuenta que esta energía proviene de un elemento que se encuentra por fuera del planeta:

¡¡¡El SOL¡¡¡.

-¡Sorprendente¡- pensaron ambos. El sol garantiza que en las plantas se lleve a cabo la fotosíntesis, que es el responsable de la producción de frutos en ellas y, de las cuales gran parte de los seres vivos tomamos alimento. 
Expresó María Camila, es por esto que las plantas se conocen como Productores, y constituyen un eslabón muy importante en la obtención de energía y alimento para todos. 
¿Te acuerdas de los autótrofos?

Aunque, el sol no es el único responsable de la producción de alimentos, lo es también la polinización, que es el proceso mediante el cual, se transportan polen de unas flores a otras para que pueda germinar el fruto en las plantas. Aclaró Juan Andrés. ¿Sabías que las plantas no son las únicas que realizan la fotosíntesis? En el mar existen algas que también realizan este proceso. ¡¡¡Súper Wow¡¡¡

-Luego de producirse el fruto, algunas especies animales lo toman para alimentarse y sobrevivir como el hombre, las ardillas y las aves - dijo María Camila- Las especies que se alimentan de otras especies se conocen, como consumidores, y en el caso de las aves o ardillas que se alimentan de las plantas se llaman consumidores primarios. Es decir, que estos organismos son heterótrofos.

- Las aves sirven de alimento para otras especies, como el hombre. De la misma manera las ardillas, que son el alimento de otras especies, como las águilas y las serpientes – Expuso Juan Andrés – en este caso, nos encontramos nuevamente a los consumidores, solo que esta vez se conocen como Consumidores secundarios. Los seres humanos, son muy especiales en este proceso, porque ellos se encuentran entre los consumidores secundarios y terciarios, sí, los que se alimentan de los consumidores secundarios. ¿Y dónde van los restos de estos seres luego de ser consumidos? 

-Todas estas especies cuando mueren, sufren un proceso llamado descomposición, en el cual los organismos desaparecen por la acción de unos pequeños seres conocidos como descomponedores, aquí encontramos por ejemplo, a las bacterias, existen tantas, que cada una tiene diferentes formas de descomponer a los seres cuando mueren – continuó María Camila. 
María Camila y Juan Andrés fueron interrumpidos por sus padres que los escuchaban atentos. 

-¿Y qué pasó con la energía del sol? ¿Qué se hizo, se desapareció? – preguntaron ambos padres.

-¡¡¡Nooooo¡¡¡- exclamaron Juan Andrés y María Camila
- La energía del sol, se distribuyó a través de toda esta cadena, el sol proporciona la energía para que nazcan los frutos, que son consumidos por las aves –Aclaró Juan Andrés
-Posteriormente, las aves son consumidas por nosotros en la alimentación, y al final, nosotros seremos descompuestos por las bacterias, cuando morimos –Explicó María Camila.

-Y de esta forma la energía del sol, se mezcla en la tierra, que es necesaria para que las plantas puedan mantenerse en pie y seguir produciendo más alimento para todos.- Expuso Juan Andrés.

-De ahora en adelante, me comeré toda mi sopa y mi carne guisada, porque gracias a ellos y al amor que le pones mamá, tengo la energía suficiente para irme a entrenar- Manifestó Juan Andrés y abrazó fuertemente a su mamá. 

-Y esto, ¿solo ocurre en la tierra?- indagó el papá de María Camila.

-No, también ocurre en los ecosistemas acuáticos, gracias a ellos tenemos la piangua, los camarones de tu delicioso arroz atollado. Déjame explicártelo –Propuso María Camila- mientras tomaba a su padre de la mano. 

Luego de esta importantísima aclaración y de que ambos les quedara claro cómo funcionan las cadenas tróficas para la obtención de energía y alimentos, cada uno regresó a sus obligaciones habituales.




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